El 30 de junio, la Unión Internacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos (IUFoST) difundió un Boletín de Información Científica donde trata el tema del brote de ETA en Alemania por E. coli O104:H4, ligado al consumo de brotes de semillas.
El brote originado por Escherichia coli O104:H4 productora de toxina Shiga ligado al consumo de brotes ha llevado a más de 3800 casos confirmados de enfermedad, incluyendo 823 casos de síndrome urémico hemolítico (SUH) y 44 muertes. Aunque se desconoce el origen de este serotipo, ya había sido aislado en Alemania diez a?os atrás. El brote fue una consecuencia de la suma de dos vulnerabilidades (un patógeno muy virulento y un alimento de alto riesgo) dentro de la cadena alimentaria, que en conjunto tuvieron consecuencias desastrosas.
La E. coli se encuentra en el tracto gastrointestinal de todos los animales de sangre caliente, incluyendo al ser humano. Esta bacteria tiene una estrecha relación con los mamíferos, que se ha establecido a lo largo de 140 millones de a?os, desde que los primeros roedores aparecieron sobre la tierra. La gran mayoría de E. coli son no patógenas y son esenciales para la salud.
El objetivo del Boletín del IUFoST es brindar información sobre Escherichia coli productora de toxina Shiga (STEC) e informar de qué manera el serotipo O104:H4 ha cambiado la comprensión de la patogenicidad de esta bacteria. Se discuten también los desafíos futuros y las investigaciones necesarias para controlar STEC.
El autor del trabajo es el Dr. Keith Warriner, académico del Departamento de Ciencia de Alimentos y Director de Inocuidad Alimentaria y del Programa MSc en Calidad de la Universidad de Guelph, Canadá.
